Mariela lleva como dos semanas insistentemente diciéndome
que quiere aprender lenguaje de señas. Todos los días me lo recuerda. Y yo, en
mi trajín diario, le digo que en algún momento encontraré quién le enseñe, como
nuestra amiga Betsy, la mamá de Johan, quien es intérprete de señas. Pero mi
hija no se rinde y me salió con esta hace uno rato:
-“Mamá, mamá, ¿te acuerdas que yo quería aprender a
hablar con las manos como hacen con los monos y sale en la película de Planet
of the Apes”, me dice.
-“Sí, hija. Me lo dices todos los días”, le
respondo.
-“Pues ya estoy aprendiendo”, me dice riéndo.
-“¿A sí, y quien te enseñó?’, le pregunto.
-“Fácil. YouTube”, me responde y las dos
comenzamos a reír a carcajadas.
De pronto, me da el celular y me dice: “Ya me
sé el abecedario Mamá. Ya mismito puedo ayudar a otras personas que no pueden
hablar bien”. Y acto seguido empezó a bailar al son de la música del ABC.
Y yo pensé que mi hija sigue sorprendiéndome.
Es un milagro y un testimonio de que no hay imposibles.
-“Sí, Mariela, ya mismo vas a poder ayudarlos”,
le dije, con un nudo en la garganta para evitar llorar.
-“Sí, Mamá, seremos todos felices hablando así”,
me dijo.
Así será.
No comments:
Post a Comment